Experimenta los beneficios de la fibra y el cereal
La fibra soluble baja el azúcar en sangre. La avena, se cuenta entre las mejores fuentes de fibra soluble, conoce cómo puede ayudarte.
La fibra soluble, presente en la avena, la cebada, los frijoles y algunas frutas y verduras, baja el azúcar en sangre de manera óptima, pues se disuelve en agua, lo que ocasiona que forme una especie de goma en tu sistema digestivo.
Esta goma crea una barrera entre las enzimas digestivas del estómago y las moléculas de almidón de los alimentos. Eso retrasa la conversión de los carbohidratos del almidón en glucosa, y tu azúcar sanguíneo es más bajo.
La avena, que se cuenta entre las mejores fuentes de fibra soluble, es famosa por bajar el colesterol; también puede bajar las concentraciones altas de las grasas sanguíneas nocivas llamadas: triglicéridos, así como reducir la presión arterial, por lo que puede disminuir el riesgo de sufrir cardiopatías.
Incluye más fibra soluble en tu dieta; empieza con estas fáciles estrategias:
Desayuna y sustituye harina por avena
No te pases de una taza, y llena el resto de tu plato con fruta fresca y un poco de nueces. No consumas avena instantánea, está muy procesada, por tanto, se digiere rápido y eleva la glucosa.
A la hora de hornear, muele un poco de avena en la licuadora y sustituye hasta una tercera parte de la harina de la masa.
Otra idea: rocía salvado de avena seco sobre estofados, guisos y sopas, para espesarlos con fibra.
Come avena de postre
Sirve tartas de fruta con una crujiente cubierta de avena, vigila el contenido de mantequilla, es mejor usar aceite de canola.
Desayuna cereal con alto contenido de fibra
Busca una marca que incluya la palabra “integral” como el primero de su lista de ingredientes, y que tenga por lo menos 3 g de fibra por porción.
Procura evitar los cereales azucarados; trata de ver que los gramos de azúcar por porción no rebasen un digito. De esta manera controlarás las calorías y evitarás la montaña rusa del azúcar sanguíneo que conduce a las punzadas de hambre a media mañana y a los antojos de comida.
Agrégale moras al cereal, a fin de que consumas también una porción de frutas. Para añadir proteína, vierte sobre tu cereal un poco de leche descremada y tal vez semillas de linaza molida.
Incluye pan integral en tu alimentación
Compra pan y bollos con la palabra “integral” al principio de la lista de ingredientes, si un producto en verdad es de grano entero, la etiqueta enlistará trigo integral, avena integral o algún otro grano integral como primer ingrediente.