El rostro, cuello y escote son áreas que requieren atención especial para mantener una apariencia saludable y radiante. La piel en estas zonas es más fina y sensible, por lo que es susceptible a la deshidratación, líneas finas, arrugas y manchas solares.
Muchos cosméticos comerciales prometen una piel impecable y una juventud eterna… a un precio muy elevado. Pero tú puedes obtener los mismos resultados con fórmulas naturales que se preparan fácilmente en casa, sin gastar mucho dinero. Solo te recomendamos tener a la mano un termómetro para la preparación y guardar los productos en un lugar fresco.
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Las castañas de Indias tienen una larga tradición en la cosmética. Desde hace cientos de años se conoce su capacidad reafirmante. Por su parte, las propiedades emolientes de las almendras suavizan la piel, reducen la apariencia de las arrugas y calman irritaciones. Fabrica la crema con estos ingredientes:
Muele las castañas y mézclalas en un tazón con el aceite de jojoba; agrega el agua de hamamelis y el jugo de limón. Incorpora todo perfectamente. Por último, agrega la crema base, revuelve con cuidado y vacía en un enva- se de vidrio o porcelana con tapa.
El aceite de germen de trigo es rico en vitamina E, lo que lo hace muy eficaz para combatir el envejecimiento cutáneo. Los demás aceites esenciales fomentan la renovación celular. Para este tratamiento necesitas:
Mezcla bien todos los aceites en un tazón y viértelos en una botella de vidrio oscura. Aplica cada noche después de la limpieza, dando un suave masaje en rostro, cuello y escote.
Esta receta la crearon los griegos casi 300 años antes de nuestra era, y desde entonces solo ha tenido pequeñas modificaciones. Puedes encontrar los ingredientes para prepararla en una droguería o en línea.
Vierte el gel de aloe vera y el aceite de maíz en un tazón. Mézclalos con un batidor de globo o con una batidora eléctrica. Derrite a baño María la cera y la lanolina; incorpora lentamente la mezcla anterior. Retira la olla de la estufa y añade el agua de lavanda y el aceite de manzanilla. Revuelve hasta que se enfríe y solidifi- que. Puedes usar esta crema en la mañana o en la noche, tanto en el rostro como en el cuello.
Crema de caléndula
Esta flor se puede sembrar fácilmente en el jardín o incluso en una maceta en un balcón. La crema limpia la sangre y cura impurezas inflamadas. Necesitas:
Calienta el agua y, cuando hierva, viértela sobre las flores en un tazón. Tapa y deja enfriar. Después, cuela el líquido, exprimiendo bien las flores, y mézclalo con el aceite. Revuelve con la crema base y guarda la crema en un envase de vidrio o de porcelana.
Desde hace siglos, los indígenas de Norteamérica conocen bien las propiedades curativas del aceite de jojoba, que se extrae de la nuez de la planta desértica Simmondsia chinensis. Para elaborar esta crema, necesitas:
Derrite a baño María la cera, la lanolina y la manteca de cacao. Agrega el aceite de jojoba y calienta todo a 60 °C. En otra olla, calienta el agua de flor de naranjo a 60 °C y luego incorpórala cuidadosamente a la primera mezcla. Cuando la crema esté tibia, añade el aceite de flor de naranjo y sigue moviendo hasta que se enfríe. Viértela en un envase de vidrio con tapa.
Si tu piel es sensible o seca, te recomendamos usar esta crema por las noches. El aceite de lavanda revitaliza la piel y ayuda a mantener el tejido firme. Necesitas:
Combina todos los ingredientes en un tazón hasta obtener una mezcla suave. Guár- dala en un tarro de vidrio o de porcelana.
La piel de esta zona del rostro es muy sensible; por eso requiere un cuidado especial. Los aceites vegetales, en general, aportan la hidratación necesaria a esta delicada zona y mantienen su aspecto suave. Para preparar este aceite nutritivo, necesitas:
Mezcla los dos aceites en un tazón. Viértelos en un gotero o envase de vidrio oscuro. Después de la limpieza facial, aplica direc- tamente alrededor de los ojos, o moja una bolita de algodón y colócala a manera de compresa sobre los párpados durante unos minutos.
Este antiguo remedio antiarrugas es muy sencillo, pero igual de eficaz que un cosmético caro. Para prepararlo, necesitas:
Añade unas gotas de aceite a una pequeña can- tidad de lanolina y mezcla bien. Aplica alrededor de los ojos antes de dormir, dando golpecitos con el dedo anular de fuera hacia dentro.
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