Auriculoterapia
Según la auriculoterapia, el pabellón de la oreja representa un feto de cabeza. La ubicación de los puntos se desprende de esta similitud.
Es el tratamiento de enfermedades mediante una acción física (pinchazos, presión, corriente eléctrica, campo magnético, radiación luminosa) aplicada a puntos específicos del pabellón auricular. La auriculoterapia se considera una terapia segura cuando se realiza por un profesional capacitado. Los efectos secundarios son generalmente leves y desaparecen por sí solos.
Principios
La auriculoterapia considera que el cuerpo se proyecta de forma simétrica en los pabellones auriculares, y que a cada órgano o tejido le corresponde un punto de la oreja. Hay más de 200 puntos por pabellón.
Mientras el organismo funcione con normalidad, los pabellones auriculares serán silenciosos: no se detectará ningún punto. Pero si hay un trastorno en alguna parte del cuerpo, los puntos se hacen detectables en la zona correspondiente de las orejas, ya sea en el lado enfermo, o en el lado opuesto, o incluso en ambos lados al mismo tiempo. Una acción sobre estos puntos permitiría tratar la parte del cuerpo que presenta la dolencia.
Se han formulado muchas hipótesis para explicar cómo la estimulación de estos puntos actúa sobre elementos del cuerpo, pero ninguna se ha confirmado. Según la medicina tradicional china, la energía pasa por los meridianos, que tienen ramificaciones en los pabellones auriculares. Los auriculoterapeutas atribuyen estos efectos a la liberación de endorfinas, como ocurre con la acupuntura.
Lo que cura
Reumatismo, ciática, dolor de espalda, migraña o neuralgia, menstruaciones dolorosas, herpes, trastornos respiratorios funcionales (asma, tos crónica, sinusitis crónica, bronquitis recurrente), trastornos digestivos (colitis, trastornos del tránsito, etc.), trastornos sexuales, síndrome premenstrual, alergias (rinitis alérgica, eccema, urticaria), estrés, ansiedad o insomnio. Además, puede ayudarte a dejar de fumar, y es una de las técnicas usadas en los cuidados paliativos.
Contraindicaciones
- Trastornos importantes (esto se debe a que la detección y el tratamiento de los puntos a veces son desagradables, incluso dolorosos, lo cual puede desencadenar reacciones imprevisibles), bloqueos vertebrales, toma de corticoides o neurolépticos.
- No sirve si se padece una enfermedad grave, cáncer o insuficiencia endócrina. Sin embargo, puede ayudar a tratar los trastornos asociados o a aliviar el dolor residual.
Advertencias
- La búsqueda y el tratamiento de los puntos auriculares pueden ser bastante molestos.
- Debe tenerse precaución en caso de embarazo. Consulta a un auriculoterapeuta acostumbrado a tratar a mujeres embarazadas.
¿Cómo se desarrolla una sesión?
El diagnóstico
- La auriculoterapeuta hace un interrogatorio detallado: te pregunta el motivo de la consulta; tus padecimientos pasados y presentes; las enfermedades de tus padres, abuelos y hermanos; tu vida laboral y familiar; tu estilo de vida (alimentación, actividad física, adicciones, etc.), entre otras cosas.
- Después realiza un examen físico tradicional, si es necesario; luego, un examen visual de las orejas en busca de lesiones y, por último, busca los puntos a tratar. Para ello, se coloca detrás de tu cabeza y palpa rápidamente los pabellones auriculares. A continuación, realiza una detección precisa con una sonda de presión que le permite pasar por encima de la oreja manteniendo una presión constante. Los puntos correspondientes a la parte enferma del cuerpo suelen ser dolorosos.
- La auriculoterapeuta también puede examinar tus oídos con un detector de puntos, que es una caja electrónica conectada a dos electrodos. Tú sostienes uno de ellos en la mano, mientras la terapeuta explora tus oídos con el otro. Al pasar sobre un punto enfermo, el aparato emite una señal.
El tratamiento
- Comienza justo después del examen. En general, la especialista trata dos o tres puntos con agujas estériles.
- En particular si padeces dolores crónicos, añade una estimulación eléctrica de muy baja intensidad en las agujas.
- También puede optar por utilizar las lla- madas agujas o tachuelas semipermanentes. Estas tienen la ventaja de permanecer en su lugar hasta que se eliminan por sí solas por efecto de la cicatrización (desde unos días hasta dos o tres semanas). Una vez colocadas, se protegen con un ligero vendaje adhesivo o una gota de pegamento quirúrgico.
Después de una sesión
- Espera un poco antes de levantarte, para evitar posibles molestias o mareos. Por otro lado, una vez que te hayas levantado, realiza algunos movimientos lentos.
- Ten en cuenta que, aunque la mejora generalmente es rápida, puedes presentar un agravamiento temporal de los síntomas o un nuevo trastorno transitorio, sobre todo después de la primera sesión.
- Si tu auriculoterapeuta utiliza agujas semipermanentes, tendrás que estimularlas varias veces al día mediante presión o con pequeños imanes. Ella te explicará cómo hacerlo durante la primera sesión.