Conoce por qué el ruido puede ser tan peligroso y dañino

Existe una hipótesis que explica que el ruido puede provocar deterioro físico, provocar tensión y enojo, y libera hormonas del estrés.

 ·  08/09/2022
Conoce por qué el ruido puede ser tan peligroso y dañino

La exposición crónica al ruido, podría incrementar el riesgo de sufrir un infarto de miocardio; además, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), escuchar sonidos estruendosos constantemente (por encima de los 67-70 dB, intensidad equivalente a la generada por el tráfico) puede provocar hipertensión.

Tras evaluar los casos de varios pacientes que habían ingresado a 32 importantes hospitales de la ciudad de Berlín como consecuencia de un infarto, un grupo de investigadores concluyó que el ruido ambiental había elevado el riesgo en más del triple para las mujeres y hasta en un 45% para los hombres.

En general, los habitantes de áreas con tráfico vehicular pesado corrieron un riesgo 46% mayor que los vecinos de zonas más tranquilas.

Durmiendo con el enemigo

Si tu pareja ronca, la intensidad del ruido al que te expones por las noches podría bastar para alterar tu sueño y elevar el riesgo de desarrollar afecciones cardiovasculares.

En algunas personas, la ronquera puede traducirse en sonidos de hasta 95 dB, intensidad equivalente a la de un camión que cimbra las calles a su paso. Durante un estudio, se demostró que la exposición al ruido de los ronquidos eleva la presión arterial. Además, quienes roncan corren mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

La mejor manera de corregir esta situación es convencer a tu pareja de acudir a consulta médica, someterse a las pruebas correspondientes y recibir tratamiento. En tanto eso no suceda, te sugerimos utilizar tapones de oídos especialmente diseñados para atenuar el ruido de los ronquidos.

Una de las hipótesis que intenta explicar el vínculo entre el ruido y el deterioro físico es que el estruendo, al provocar tensión y enojo, estimula la liberación de hormonas del estrés y eleva la frecuencia cardiaca, la presión arterial y la concentración de lípidos en la sangre.

Las personas que padecen afecciones cardiovasculares son las más vulnerables, pues el ruido puede alterar el ritmo cardiaco.

Protege tus oídos

Si tu trabajo te expone a ruidos de alta intensidad, lo más sensato es utilizar en todo momento tapones auditivos diseñados para suprimirlos. También es importante proteger los oídos si practicas deportes estruendosos, como el tiro.

Considera, además, que los sonidos de menor intensidad pueden producir lesiones y que en el día a día llevamos a cabo un sinfín de tareas ruidosas sin pensar en las posibles consecuencias de estas conductas en el aparato circulatorio (o la audición).


Así que compra varios pares de tapones de oídos de buena calidad y con un índice de reducción sonora elevado; úsalos cada vez que te involucres en actividades estruendosas, como podar el césped o accionar herramientas eléctricas.

Existen pequeños tapones de oídos especializados que atenúan por igual todas las frecuencias. Están diseñados para utilizarse en eventos como conciertos de rock, ya que permiten al usuario escuchar la música con claridad sin exponerse a los peligrosos niveles de ruido amplificado.

Bájale

¿Sueles escuchar ruido de fondo estruendoso por periodos prolongados? Intenta reducir la intensidad del sonido, exponerte a él lo menos posible y minimizar la presencia de este tipo de estímulos en otros momentos.

Según distintos estudios, la exposición crónica al ruido eleva la presión arterial, lo cual incrementa, a su vez, el riesgo de sufrir un infarto o EVC.

Ruidos nocturnos

La exposición crónica a ruidos nocturnos que superan los 50 dB (equivalente al tráfico ligero) es un peligro, según la OMS. Según otros estudios, cuando el ruido del tráfico rebasa los 30 dB, quienes se exponen a él enfrentan problemas para conciliar el sueño, lo cual ya de por sí es riesgoso.

El hecho es que, hoy día, muchos vivimos en ciudades ruidosas, donde el alboroto nocturno a veces llega a alterar el sueño.

Si escuchas el ruido del tráfico en tu casa, pon cortinas pesadas e instala ventanas de doble vidrio. Si esto no resuelve el problema, usa tapones de oídos o una máquina de ruido blanco para conciliar el sueño.

¿Demasiado fuerte?

¿Cómo saber si los sonidos de tu entorno tienen el potencial de deteriorar la audición o la salud cardiovascular? Es posible que estés en peligro si…

  • Con frecuencia te expones al ruido de herramientas pesadas, como taladros neumáticos o martillos.
  • Utilizas herramientas eléctricas pesadas más de 30 minutos al día.
  • A lo largo de la jornada te expones constantemente a ruidos en tu sitio de trabajo: un aeropuerto, obras en construcción, una fábrica con maquinaria industrial o herramientas eléctricas ruidosas, un club nocturno, etc.
  • Tienes exposición prolongada al ruido del motor de una motocicleta (90-100 dB), el estéreo a todo volumen dentro de un auto (95-140 dB) o un bar lleno de personas (90-95 dB).


Revistas