Expresa gratitud

Todos tenemos listas de “cosas que hacer”, pero quizá deberíamos pasar más tiempo en nuestras listas de “cosas que agradecer”. A menudo damos por sentadas la salud, la familia, las amistades y los talentos especiales, hasta que un día se ven amenazados.

De acuerdo con algunas investigaciones, el cerebro humano tiene una tendencia natural a retener y recordar más las experiencias negativas que las positivas. Tú, de forma consciente, puedes revertirlo al dar más peso a todo lo bueno que tienes y que te ocurre, por pequeño que sea.

Para esto, la gratitud por las cosas positivas que pasan en tu vida es fundamental. Al agradecer, tu mente se enfocará en los aspectos buenos y tendrás pensamientos y sentimientos saludables.

Recordar lo bueno de la vida también nos ayuda a reducir el dolor que causan las cosas malas. Aunque no lo creas, con unos segundos basta, y sólo debes seguir estos consejos para realizar una práctica diaria de gratitud.

Observa

Recopila imágenes y palabras conectadas a la felicidad de tu vida: fotos familiares de paseo, postales de lugares en los que te has divertido. Haz un “tablero de agradecimientos”, y cuélgalo cerca de tu lugar de trabajo o de descanso. Estos recordatorios iluminarán tu perspectiva diaria.

Escribe

Usa un diario de agradecimiento para dejar constancia de los eventos cotidianos que te hacen feliz. Tómate un tiempo antes de ir a dormir para hojearlo y reflexiona acerca de lo que ha funcionado bien. Quizá recibiste un cumplido en el trabajo, encontraste dinero en la bolsa de tu saco  observaste la naturaleza en un paseo matutino. Releer lo que escribiste puede mejorar tu actitud en días tristes. 

Expresa tu gratitud

Hay personas que hacen que el mundo sea un lugar mejor porque te hacen reír, te apoyan, están al pendiente de ti y te hacen sentir querido. ¿Alguna vez les has agradecido por todo eso? ¿Por qué no escribirles un mensaje y hacerles saber lo importantes que son? Además de ser algo bueno para ti porque así puedes practicar la gratitud, seguro les robarás una sonrisa.

Imagina

Si el día no marcha como esperabas, tómate unos minutos para imaginar cómo te gustaría que fuera. Esto es lo que los atletas olímpicos hacen antes de competir: visualizan un desempeño impecable. ¿Qué quieres hacer que no has hecho? Ese futuro perfecto puede no estar tan lejos como imaginas.

Suelta y ten gratitud

Si te descubres pensando “pobre de mí”, hazte el propósito de eliminar toda queja de tu vocabulario durante un día. En momentos de crisis, cuenta hasta 10 o enumera las cosas buenas que tienes.

“Solo se puede decir que estamos vivos en los
momentos en que nuestros corazones tienen
conciencia de nuestros tesoros”.
Thornton Wilder, escritor

Ahora ya lo sabes, para agradecer no necesitas mucho tiempo pero hacerlo te ayudará a apreciar las cosas positivas que te suceden, serás una persona más feliz y más sana, con una perspectiva más positiva de la vida.

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