El virus de la leucemia felina es la causa más importante de muerte. El 8 de agosto se conmemora el Día Internacional del Gato.
La mayoría de los dueños de gatos consideran que la probabilidad de que enfermen es menor a la de los perros, debido a que los felinos suelen permanecer en casa. Sin embargo, existen enfermedades como la leucemia felina que los pone en riesgo.
“Las enfermedades virales felinas son muy frecuentes, pues existen muchos gatos en condición de calle, o bien, por la falta de conocimiento de sus dueños sobre la vacunación”, mencionó Alejandro Sánchez, Gerente Técnico de la Unidad de Animales de Compañía de MSD Salud Animal en México.
La forma más común de contagio es la transmisión vertical, es decir, a través de la madre a los cachorros, por medio de la placenta o durante la lactancia.
También se contagia por secreciones nasales de animales infectados; por compartir platos de agua o comida, o bien, por mordeduras.
A la leucemia felina también se le conoce como “la enfermedad de los gatos amistosos”, ya que muchos de ellos se contagian por lamerse unos a otros.
Algunos de los signos más frecuentes que experimentan los felinos al contagiarse son:
Así mismo, la leucemia felina puede desencadenar la presentación de tumores como un linfoma.
Aunque es un padecimiento de fácil transmisión, se cuenta con vacunas.
Por ello es de suma importancia la prevención del contagio a través de un adecuado programa de vacunación y de identificación de animales enfermos.
Aunque en México los gatos son de los animales de compañía preferidos (suman unos seis millones a nivel nacional), aún es bajo el porcentaje de animales que es llevado con un Médico Veterinario para prevención de ese tipo de enfermedades.
La inmunización es la opción más importante para evitar que los gatos contraigan el virus que provoca la leucemia felina.
Y es que una vez adquirido, no existe un tratamiento que pueda curarla y sólo pueden administrarse medicamentos para una mejor calidad de vida por un poco más tiempo, precisó Yon Alesander Palacio, Coordinador Técnico de la Unidad de Animales de Compañía de MSD Salud Animal en México.
Finalmente, hay que tener presente que un gato no sólo puede ser el mejor de los amigos.
Está comprobado que contar con uno como parte de la familia reduce el estrés, baja la tensión arterial y beneficia el sistema inmunológico de sus amigos humanos.
Además, al ser animales cariñosos, pueden ayudar a las personas a mantener una buena autoestima y salud emocional.
Por todo ello, tener un gato significa adquirir el compromiso de atenderlo, vacunarlo y cuidar de su salud y de la nuestra.
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